Los filtros FLD son de tonalidades magenta y mitigan la iluminación artificial fluorescente en espacios interiores, donde no se cuenta con luz natural.
Es un filtro de doble rosca que se instala en el objetivo de la cámara y permite fijar otros filtros o viseras al mismo. Al poseer un aro metálico no se tiene que apretar totalmente, solo se debe enroscar hasta asegurarlo, para que no se suelte. Para comenzar a utilizarlo, se realiza la composición de la escena, se enfoca el objetivo, se gira el filtro y se pre visualiza el efecto sobre la composición, a través del visor.
Los filtros FLD también son conocidos como filtros de corrección de color, en este caso del tono verde-azulado, producto de la iluminación fluorescente. Cuando se emplea se logra obtener tonos más suaves, sin necesidad de utilizar un flash. Actualmente, esta misma función la cumple la herramienta balance de blancos (WB) de las cámaras digitales, que compensa automáticamente la luz de tungsteno o la luz fluorescente, cuando se trabaja en un espacio interior.
Si el objetivo es brindar a la escena un efecto especial rosado, se deben utilizar los filtros FLD. Así mismo, se implementan los filtros FLD, si se desea generar una imagen en b/n, brindando un mayor contraste a los elementos.
Es importante antes de escoger los filtros FLD, determinar que corresponda el diámetro del lente con el del filtro. Normalmente, el diámetro se encuentra especificado en el lente, seguido por el signo ø. De lo contrario, se puede medir la parte frontal del lente con un metro o regla y el diámetro es el que corresponde a la medida de la rosca interna.
Los diámetros existentes son: 52mm, 58mm, 67mm, 72mm, 77mm.